ANA

La primera visita que hicimos a la finca, ya nos dejó sorprendidos, estaba todo muy cuidado y verde, vamos al detalle.

Habíamos pedido información y en esa cita nos aclararon todas las dudas y nos enseñaron los diferentes espacios donde podíamos celebrar nuestra boda, aprovechando que hacía buen día, comimos en la terraza del restaurante.

Nuestra boda fue en Otoño, concretamente el 20 de octubre y para mi, espectacular.

Mis invitados quedaron totalmente sorprendidos, ya que al caer la tarde, con vistas a que pudiera hacer frío, nos lo decoraron todo y hasta pusieron mantas a juego, aunque finalmente nos hizo un día estupendo.

El personal super atento y Juan, el metre, siguió todas nuestras pautas.

Muchas gracias equipo!! Superasteis todas nuestras expectativas.