Lucía

Muy desagradable el artesano. Se equivocó en el tamaño de la horma del zapato que encargué para mi boda y me replicó a grito pelado, a cinco días de mi boda, que fue cuando tuvo listo el encargo, negándose a realizar ninguna modificación pese a la evidencia de que me chancleaba por todos lados. Quedé anonadada. Al menos, me devolvió el dinero, pese a que su política es no aceptar devoluciones, pero casi voy descalza a mi boda. Un trago muy desagradable. No lo recomiendo