Marta

Volvería a elegir a Rafael, ya que quedamos muy contentos con la preparación, con su trabajo el día de la boda, su entusiasmo, rapidez, y con el resultado de las fotos, ya que su buen hacer y lo que se desvive se plasma en la calidad de las mismas. ¡No pueden ser más elegantes y bonitas! Las fotos del día de la boda son recuerdo de un día inolvidable, y el fotógrafo pasa con los novios todo un día. Así que merece la pena que el fotógrafo que se elija sea el mejor y que recoja las emociones tan reales que se viven ese día de la forma más bonita posible.

También hicimos con él la sesión preboda, y no pudimos quedar más encantados con el resultado y con la sensación de confianza que nos dio.

¡Muchas gracias Rafael y Sama!