Patricia

Actividad

Pronovias - Barcelona

Fue un servicio que valoré para mi boda:

Profesionalidad
Calidad/precio
¿Lo recomiendas?

El primer contacto que tuve con Pronovias, fue para el vestido de fiesta para la boda de mi hermana. Tanto mi madre como yo, recibimos una buena atención, aunque con problemas en la fecha de entrega , pero todo correcto. 


Desde que me prometí , tenía claro que quería volver para probarme sus vestidos de novia, y sobretodo los nuevos diseños Atelier! 


Cuando llegué 10 minutos antes, me pasaron con una asesora (si es que tenía la finalidad de asesorar y no de vender a toda costa y cualquier modelo de vestido). Le enseñé los vestidos que a través de web ya había preseleccionado (tal y como me dijeron al hacer la reserva de cita). La asesora se lo miró por encima y de ellos solo 2 sabía cuáles eran... como no sabía identificar el resto de vestidos (cuando guardas como favorito un vestido en la aplicación, se guarda con nombre incluido) , me indicó donde ver los vestidos (colgados en una percha) y que yo escogiera los que me gustaran y los llevara al probador, a todo esto ella se ausentó con lo que nadie me asesoraba ni tan solo se interesó si era boda civil o religiosa, sin ra en Barcelona, ni la fecha. 


Asesora y servicio a parte, una vez tenía escogidos vestidos vistos en percha, me empiezo a probar y la calidad dejaba muchísimo que desear.... 


vestidos de 7000€ (colección Atelier) que solo con probarlos y andar hasta el espejo, iban perdiendo decoraciones como perlitas, brillantes... etc 


para que mi familia pudiera verme, tenia que salir en medio de la tienda y no solo mi familia me veía, sino que todo el que pasara por allí, podía opinar... con otra familia y novia al lado... 


cuando entraba al probador y la asesora me quitaba el vestido, otra entró para llevárselo porque su novia quería probárselo.... ¿? Si yo quería volver a probármelo, era demasiado tarde, otra novia lo tenía puesto y tendría que esperar mi turno... 


como comentario final, la asesora si o si, me quería vender un vestido que ni era mi estilo, ni quedaba bien con mi estilo de boda, que ni yo ni mi familia hizo comentario positivo, y en el cual no me sentía cómoda. Aún así, me plantó un velo y una peineta para hacerme ver que era mi vestido... 


Lógicamente, salimos de allí sin vestido y con decepción enorme por la calidad, el servicio y la atención... Eso si, las copa de cava las reparten como golosinas, para que nadie diga que no tuvieron un trato exclusivo... 


En resumen... parecía un mercadillo en la que el objetivo de todas las asesoras, era vender el maximo número de vestidos ese día, sin prestar atención a gustos, opiniones o estilo de las novias. 


Por si sirve de algo mi opinión, deciros que Pronovias es pura publicidad.... sólo eso. 

9 de octubre de 2018