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Nos casamos en julio de 2020 en la Magnanerie de Saint Isidore y tenemos maravillosos recuerdos de ello.

El lugar es increíble: el jardín seguramente hará las delicias de los novios y sus invitados. El escenario es mágico, tanto para nuestra ceremonia secular como para el cóctel.

Virginie y Cécile son muy profesionales y os relevan enormemente para los preparativos de los últimos días (nuestra única misión es encomendarles nuestra decoración). Por eso tuvimos la alegría de descubrir al mismo tiempo que nuestros invitados nuestra decoración con algunas iniciativas de su parte que fueron de muy buen gusto.

Muchas gracias !

Justine y Stéphane (13.07.2020)