andres22

Al principio, no vimos la necesidad de contratar wedding planner, incluso la finca nos comentó que era innecesario. Nos pusimos a trabajar en la boda con toda la ilusión del mundo. El vestido, el traje, los autobuses, los cubretacones, las bailarinas, los pétalos, los puros y un largo etc...
A tres meses de la boda, visitamos la finca y nos dimos cuenta que nos faltaban muchas cosas, pero sobretodo había un concepto que nos abrumaba y es quizá el más importante de todos... El Timing. Coordinar a todos los actores de ésta, la película que es tu boda, para que vayan coordinados y todo salga bien. Cuando se acerca la boda y piensas detenidamente en esto, te das cuenta que es literalmente imposible que el día de tu boda puedas estar pendiente de todas estas cosas, porque tú mismo juegas un papel fundamental. Es ahí donde te entra el agobio y empiezas a buscar wedding planner.
Nuestra finca nos dió recomendación de 3 wedding planner, llamamos a las 3, no nos guiamos por precio, exclusivamente por feeling. Para nosotros era importante la disponibilidad, ya que estábamos a 3 meses de la boda y es un servicio que normalmente se contrata con más antelación.
Lo tuvimos claro cuando hablamos con Begoña, respiraba profesionalidad, atención y tenía disponibilidad para nuestra boda por suerte.
Al comienzo hicimos recopilación de lo realizado hasta el momento; proveedores, presupuestos, facturas, fianzas, revisión de contratos... Luego nos organizamos con un tablero de trello y nos pusimos a trabajar.
Nos iba poniendo deadlines para las diferentes tareas en las que nosotros teníamos que participar, nos organizaba reuniones con los proveedores que todavía no teníamos contratados, se puso en contacto con los ya contratados y les comunicó que desde ese momento ella coordinaba, en algunos casos incluso nos mejoró las condiciones renegociando o cambiando proveedores (en este punto la wedding planner te sale gratis), te da recomendaciones de lo que se suele hacer en otras bodas, protocolos de ceremonia y sobretodo se empieza a elaborar un Timing.
Para cuando llega el día de la boda, todo está preparado hasta el más mínimo detalle. Qué música va a sonar en qué momento, quién va a dirigir los invitados para un lado u otro, cuanto tiempo hay que estar haciendo fotos aquí o allá, quién va a hablar en el banquete y cuánto tiempo. Y así, con infinidad de cosas...
Begoña, cuenta con la ayuda de 4 personas más a parte de ella para todas estas acciones fluyan con fluidez el día de tu boda.
Como es lógico, tu boda es una situación que jamás has vivido, fuera de tu zona de confort, supercompleja y estás expuesto al juicio público de familiares y amigos, quieres que todos se lo pasen bien y que todo esté bien organizado.
Finalmente todo salió de fábula, pero porque todo se organizó muy bien. Y sobretodo, porque estaba Begoña de directora de orquesta dando salida a cada uno de los actores en el momento adecuado. Maquilladores, fotógrafos, coche novia, llegada y salida de la ceremonia, tiempo de fotos postceremonia, grupos musicales, Dj, intervenciones durante el banquete, baile nupcial e inicio de fiesta.
Sin Begoña, consideramos que organizar todo esto hubiera imposible y jamás hubiera salido tan bien, sino es por la tenacidad y empeño que le pone Begoña desde el primer día de su contratación.
En algunos momentos los quehaceres del día te gobiernan y te relajas pero ella está ahí para recordarte si hay que hacer una u otra cosa. En algunos momentos piensas que te has contratado un jefe, pero es necesario para cumplir tiempos y que todo esté listo para el día de tu boda.
De tal manera, y por concluir... ¿Es necesario tener wedding planner? Rotundamente sí. ¿Es recomendable Begoña y todo el equipo de Love at Forty? Rotundamente SI. Son maravillosos, en el trato, en la profesionalidad y en la ejecución.
Espero que sí me estás leyendo todo salga fenomenal el día de tu boda, la mía fue de dpm!!